Quién me iba a decir hace un par de años que me acabarían gustando tanto las muñecas Tilda! Así que poco a poco una vez más la familia sigue creciendo y con ellas su “historia culebrón” familiar 😀
Después de que la desperdigada Ambrosia consiguiese convencer a su hermana Catalina, la valiente marinera-repostera, y también a Margarita la jardinera y agricultora, las chicas se vieron en un problema para gestionar el negocio familiar que han montado dedicado a los huertos urbanos y huertos verticales….necesitaban alguien con formación y experiencia en gestionar empresas, aquello a lo que se suele llamar “gerente”, y ni cortas ni perezosas el trío decidió ofrecerle (o más bien pedirle) a su prima Lucrecia que las acompañase en esa aventura.
Lucrecia, es lista, inteligente y sofisticada, además estudio ADE en una fabulosa universidad en Suiza, habla 5 idiomas y es una Tilda de mundo, la ciudad de Ginebra la ha acogido durante años, y era difícil que dijese que si a las aventureras agricultoras, pero como los cambios de aires siempre son positivos, le pareció que el calor y el sol de España y además la compañía de sus primas sería muy divertida!
Como Lucrecia quería estar preparada para la vida aquí, decidió hacerse el mismo tipo de peinado a base de un moñito a cada lado, un poco más bajos de lo habitual, pero con un flequillo despuntado la mar de cool y por supuesto un adorno a base de flor rosa para darle glamour al asunto, tantos años de buenas peluquerías y centros de estética no podían irse por la borda en un cambio de residencia!
Para el cuerpo esta vez me animé con una tela “oficial” Tilda, quería ver el resultado y trabajar con ese tipo de tela, el resultado es muy bueno, se maneja mejor y el aspecto es mucho más fino y delicado, aunque por contrapartida es más complicado hacer el relleno porque hay que tener mucho cuidado para que no quede ningún bulto. La zona de color blanco roto, que simula la camiseta, sí que es loneta.
El vestido de tipo kimono está hecho con una tela de tipo oriental para patchwork que compré a un vendedor tailandés hace ya algún tiempo, me pareció estupenda que para el diseño del vestido de esta Tilda, que por cierto es el modelo “Tilda Angel with Bird”, pero en este caso ni es angel (porque no les pongo alas) ni tiene el pájaro.
El punto más coqueto del kimono se lo da el volante que remata el bajo, está hecho con tela de patchwork de color blanco.
Ahora Lucrecia tiene mucho trabajo por delante con sus primas, una vez puestos en marcha los huertos hay que organizarlo todo, rentabililizarlo y…. también venderlo… no está muy claro quién se puede ocupar de esto dentro del negocio, quizás tengan que seguir recurriendo a “la familia” 😀